La cumbre sobre drogas de la ONU arrancó hoy con la aprobación de un documento de mínimos consensuado entre decenas de países, en el que se abre la vía a nuevas políticas, pero que está lejos de recoger las reformas más ambiciosas que demandaban muchos.
El texto, negociado el mes pasado en Viena, fue adoptado al inicio de una reunión de tres días en la que los Estados miembros analizarán el futuro de las estrategias antidrogas.
Pese al consenso, varias delegaciones tomaron la palabra inmediatamente para dejar claras sus reservas sobre el documento y, especialmente, para denunciar la ausencia de algunos elementos que consideraban clave.
La Unión Europea y países como Suiza, Noruega y Costa Rica lamentaron especialmente que la declaración no incluya un llamamiento a no utilizar la pena de muerte en delitos relacionados con las drogas, un castigo aún vigente en un buen número naciones, sobre todo en Asia.
“No hay evidencia alguna de que (el castigo capital) tenga un efecto disuasorio ante el crimen”, defendió la vicepresidenta de Costa Rica, Ana Helena Chacón.
Mientras, los países que castigan con la pena de muerte este tipo de delitos, encabezados por Indonesia, defendieron que cada Estado tiene el derecho a decidir sobre su propio sistema de Justicia en función de sus circunstancias.
Ese choque representó la profunda división que existe hoy en el mundo sobre las políticas de lucha contra las drogas, con países que están avanzando hacia la despenalización o legalización de sustancias como la marihuana y otros que siguen apostando por la mano dura.
La declaración adoptada hoy, pese a no introducir cambios radicales, sí reconoce la autonomía de los países para aplicar con una mayor flexibilidad las convenciones internacionales sobre drogas y abre así la puerta a nuevas políticas como las que defienden Latinoamérica y gran parte de Europa.
También llama a prestar más atención a los derechos humanos y a la salud en las estrategias antidroga, frente a la llamada guerra contra el narcotráfico que ha dominado el enfoque internacional en las últimas décadas.